Durante el 2019 trabajamos para llevar nuestros videojuegos educativos a Kenia y Uganda para realizar un programa piloto de seis meses, el cual nos pondría, por primera vez, bajo el radar internacional del continente africano.
Esta increíble oportunidad se logró gracias al trabajo en conjunto de las autoridades escolares en un campo de refugiados en Kyangwali, Uganda; junto con la escuela Koinonia en Kenia, e Inoma.
La alianza entre Inoma y estas dos organizaciones se efectuó con el objetivo de fomentar el DGBL (Digital Game Based Learning), que busca digitalizar y globalizar los esfuerzos educativos para que, de esta manera, sean efectivos en todo el mundo. A su vez esto implica el uso de recursos tecnológicos que faciliten y promuevan el fortalecimiento de actividades educativas de manera lúdica en los niños y niñas alrededor del mundo.
Para llevar a cabo el programa piloto con niñas y niños de primaria en ambos países, Inoma donó 20 tabletas que contenían los videojuegos TAK-TAK-TAK cargados como aplicaciones en inglés en las áreas de matemáticas, ciencia y arte. De manera simultánea, se capacitó a los docentes para que implementaran correctamente estas dinámicas en el aula de estudio y se les proporcionó un manual para efectuar los registros necesarios para la captura de información. De esta manera, nos fue posible monitorear el rendimiento de los alumnos mediante el progreso que realizaban en los juegos y las dinámicas que se implementaron.
Este programa piloto tuvo una duración de seis meses en los que fueron partícipes 60 estudiantes entre los seis y 12 años. Para el debido funcionamiento del programa se efectuaron capacitaciones presenciales a través de juntas de 20 minutos de tres a cinco veces a por semana. También se utilizaron estas reuniones para resolver dudas entre los docentes kenianos y ugandeses.
En el caso de Uganda, el vínculo se llevó a cabo mediante la organización CIYOTA, un voluntariado establecido en el campo de refugiados Kyangwali, cuya particularidad es que no solo alberga a ugandeses, sino que también a congoleños, burundeses y ruandeses.
Ahora bien, en el caso de Kenia, el vínculo se efectuó mediante el Koinonia Educational Center, una organización no gubernamental cristiana que opera en escuelas de escasos recursos en la ciudad de Nairobi. El programa de apoyo educacional está enfocado en niñas y niños huérfanos, por lo que la situación de riesgo en la que viven es grave y el acceso a la educación es escaso. Es por esto que la educación a distancia mediada por esta organización no gubernamental es vital para el crecimiento y desarrollo de los niños.
A pesar de las diferencias entre los dos contextos, Inoma logró hacer un programa piloto exitoso que atiende a las problemáticas situadas en estos dos países, por lo que nos sentimos orgullosos de los resultados y los datos que se recolectaron de esta experiencia. Concluimos que, sin importar el contexto y lugar geográfico, los videojuegos TAK-TAK-TAK se pueden adaptar al programa académico de varios países con contextos diferentes y que son una gran herramienta para enseñar a niñas y niños en condiciones adversas.
